El Pantanal, que normalmente está inundado durante gran parte del año, ha sido afectado en los últimos años por una serie de graves sequías que los científicos han relacionado con la deforestación y el cambio climático.

Desde principios de año, los incendios forestales han quemado más de 18.000 kilómetros cuadrados, una superficie del tamaño de Nueva Jersey, en la región brasileña del Pantanal.